Como en Hawaii, pero en Buenos Aires: “Oh’ No! Lulu Tiki bar”
“Oh’ No! Lulu Tiki bar & Pupu Platter”, el nuevo proyecto de Ludovico De Biaggi, Luis Morandi y Patricia Scheuer, acaba de abrir sus puertas en Villa Crespo, a un paso de Palermo.
Después de más de un año de trabajo en la obra, ambientación, diseño de menú y puesta a punto, el primer (y único, por ahora) bar tiki de la ciudad de Buenos Aires recibe a sus visitantes en Aráoz 1019.
Tiki es el nombre que reciben las estatuas de gran tamaño con forma humana en las culturas de Polinesia Central, en el océano Pacífico, que suelen señalizar lugares sagrados y -entre los años 800 y 1300 d.C.- llegaron a Nueva Zelanda, donde se convirtieron en símbolo de la cultura maorí.
Por el Pacífico, estas creencias espirituales y elementos ceremoniales llegaron a Hawaii y a su capital, Honolulu (en hawaiano, “lugar resguardado” o “bahía protegida”).
Morandi y Scheuer son los mentores de Gran Bar Danzón y, junto a otros colegas desarrollaron emprendimientos como Sucre, Bar Uriarte, BASA y Grand Café en Buenos Aires y Arturito en San Pablo.
De Biaggi (bartender de BASA y Gran Bar Danzón y ganador de la Bacardi Legacy Cocktail Competition en 2012 y 2017)) es el bar manager y está a cargo del equipo al frente de la barra.
La carta de cócteles ofrece Mai Tai, Zombie, Piña Colada (Slushie), Daiquiri De Frutilla (Slushie), Suffering Bastard, Derby Cocktail Tropical, Shark (Chan, Chan, Chan, Chan), Magnum P.I., Hemingway Special, Flamenco, Pelotón, Dr. Jones.
La carta de bebidas se completa con vinos y cervezas.
Desde fines de los años 90 hubo un resurgimiento de la cultura tiki y esto impulsó un renovado interés por sus cócteles originales y exóticos.
La vertiente tiki tiene un lugar propio y destacado en la historia de la coctelería del siglo XX.
Los tragos tiki son frutados y especiados, es una coctelería compleja que exige productos de calidad y que tiene una identidad de imagen única e impactante.
“Oh’ No! Lulu” hace honor a esa tradición y sirve sus cócteles insignia en “tiki mugs”, vasos de cerámica especiales con formas representativas.
La propuesta gastronómica incluye 12 opciones: Flor de cebolla, Alitas hawaianas, Spring rolls, Pechito de cerdo laqueado, Lomi Lomi Salmon (casi un ceviche), Croquetas de langostinos y Pescado, Baja Fish Tacos, Coleslaw polinesio, Choclo asado “Café Habana”, Big Kahuna Burger, Bo Bun Imperial y Ahí Poké.
Para probar varios platos se puede pedir el Pupu Platter -receta tradicional de la cocina hawaiana-, que incluye cinco de los appetizers del menú.
También hay dos postres: el Banoffee Pie y una Key Lime Pie.
Los tragos y la comida se piden y se pagan directamente en la barra; los cócteles se retiran allí; y la comida se entrega por número de orden asignado en la ventana que comunica la cocina con el salón.
Hay asientos en la barra, así como mesas y livings.
Con horario de apertura del local a partir de las 17 todos los días, excepto los lunes, la cocina funciona hasta la medianoche.